La cita era a las 7:00 p.m. en el Antiguo Cine Metro. Llegamos a tiempo, ya que como suele suceder en estos casos la función no empezó a la hora señalada. Lucho se ubicó en el segundo nivel, lo mismo que Rodrigo y Gabriel. Yo por mi parte, gracias a la credencial de prensa me ubiqué en el primer nivel, que a esa hora ya estaba casi completamente copado. Encontré un buen sitio junto al pasillo, pero no me acomodé demasiado porque me dí cuenta que era la hora de comenzar a sacar las fotografías de rigor. Me acerqué entonces a la lejana primera fila (acostumbrado uno a los multicines, y no a las clásicas salas de antaño). Ahí estaba la prensa haciendo lo suyo, mucho flash, mucho reflector, apuntando todos a la celebridades y a los invitados de honor. Bruno Pinasco y el polizonte de turno haciendo las notas para la televisión con Gianfranco Brero, Francisco Lombardi, Frank Pérez-Garland, Enrique Victoria, Melania Urbina, entre otros.
La ceremonia comenzó con una suerte de puesta en escena, danza y música. Luego comentaríamos que esa presentación correspondía más a una muestra de teatro que a un festival de cine. A continuación vino el momento de los discursos, unos más largos que otros, una de las cosas curiosas fue escuchar al representante de Claro llamarle Luis a Carlos Reygadas, falta de conocimiento. El rector emérito de la PUCP Salomón Lerner se extendió más de la cuenta, y Edgar Saba intentó poner la nota de humor y distensión entre tanta formalidad, además del merecido recuerdo a las recientes pérdidas en el ámbito cinematógrafico, homenaje a Ricardo Fernández, Raul Cortez, Juan Pablo Rebella y Fabián Bielinsky. Extrañamos sin embargo algún reel o clip para recordar un poco el trabajo de estos actores y directores.
Lo mejor de esta primera parte fueron los spots de promoción del festival, realizados por cuatro directores peruanos. Luego se homenajeó a Heddy Honigmann, venida desde Holanda, y a Jorge Suárez. La primera recibió el reconocimiento muy agradecida por ser recordada en su país natal, mientras que Suárez fue representado por su hijo, luego de una correcta y didáctica presentación de «Chacho» León Frías.
Finalmente subió al estrado Francisco Lombardi para presentar escuetamente su Mariposa negra, esperando que el público pudiera permanecer sentado dos horas más para ver la película (luego de toda la ceremonia previa). El director peruano pidió algunas excusas ya que la copia al parecer aún debía pasar por un último retoque técnico. Sobre la cinta en sí diremos que no pudimos observar al mejor Lombardi, el público respondía solamente a las escenas (¿involuntariamente?) cómicas. La historia parecía arrastrarse hasta llegar a un anti clímax final, con actuaciones flojas y sin nervio.
Al salir de la sala la situación se puso un poco caótica por lo estrecho del hall de entrada del Cine Metro. Una tímida lluvia bien limeña nos esperaba, dando por terminada así la velada inaugural de este Festival ElCine. Nos vemos mañana, en el día 2 de esta fiesta que recién empieza.
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