El domingo pasado Hugo Chávez, el infame presidente venezolano, había anunciado seguramente hinchando el pecho que Oliver Stone estaba pensando realizar una película sobre el golpe de estado en Venezuela ocurrido el 2002. Obviamente tal noticia era para ser tomada con cuidado pues ¿quién le cree algo a Chávez en estos días?
Hoy vemos que las dudas eran fundadas, acaba de aparecer un comunicado oficial del director estadounidense negando la realización de tal proyecto: «Los rumores sobre mis planes de filmar una película sobre el golpe de estado de 2002 en Venezuela son falsos», dice Stone. Más claro ni el agua, lo que deja sin piso nuevamente al bocón de Chávez.
Mientras se daban estos anuncios, Oliver Stone estuvo presentando dos películas suyas en Cannes. Primero, una versión restaurada de Pelotón, celebrando los 20 años de ese clásico del cine bélico. Y como añadido a tal función, no menos interesante fue la proyección de un avance de 20 minutos de su nuevo film World Trade Center, película que narra los eventos del 11 de setiembre. Con tan solo unos minutos, Stone se metió al bolsillo a la crítica que ha quedado sin aliento esperando por la versión final del film. Tal parece que el polémico director va a salir bien librado de tan delicado tema.
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