Organizado por la asociación Perú Pacha y bajo la dirección de Jovita Maeder, se llevó a cabo la tercera edición del festival de cine peruano en la capital francesa, del 15 al 21 de noviembre con la participación de 30 películas entre largometrajes, cortos y documentales. El jurado presidido por la actriz francesa Fanny Bastien eligió a las siguientes producciones:
Mejor largometraje
Madeinusa de Claudia Llosa.
Mejor documental
Manchay tiempo de María Pía Medina Luna y Florence Blum.
Mejor cortometraje
Dejando raíces, documental de Diana Follegati.
De esta manera Madeinusa se alza con un premio más en su ya dilatado recorrido, por ello felicitamos a Claudia Llosa y a todo el equipo de producción. Pero es sobre las otras dos producciones que queremos tratar en detalle.
Manchay tiempo (Tiempo de miedo) es un documental grabado en video digital que explora las huellas de la violencia política a partir de la ola de terror iniciada por Sendero Luminoso en el Perú. A pesar del arresto de los principales líderes subversivos los conflictos y traumas continuan latentes. Por ello en el año 2001 se creó la Comisión de la Verdad y Reconciliación para establecer responsabilidades y hallar caminos de salida.
El tema es desarrollado en el documental por Maria Pía Medina Luna, estudiante del Instituto de Estudios Políticos de París y Florence Blum, estudiante de producción audiovisual de la Sorbona.
Por otro lado Dejando raíces es un corto documental que va en busca de las claves de una planta milagrosa y llena de atributos mágicos: el ayahuasca. Para ello el equipo de realización se interna en la comunidad nativa shipibo – conibo de «Santa Clara» en Pucallpa y conversa con el médico vegetalista Juan Arbildo quien desciende de una familia de conocedores de este saber ancestral. El sabio indígena nos cuenta como los pueblos selváticos usan el ayahuasca para curarse y al mismo tiempo realizar viajes de introspección y conocimiento. Para ellos esta liana o enredadera es una planta maestra.
Diana Follegati realizó este trabajo como parte de sus estudios en el Instituto Toulouse-Lautrec de Lima, felicitaciones a ella y a todos quienes se arriesgan a coger la cámara y contar las múltiples historias que esconde nuestro país.
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