Violación de domicilio (2006)


Violación de domicilioBreaking and Entering
Dir. Anthony Minghella | 120 min. | Reino Unido – EE.UU.

Intérpretes:
Jude Law (Will Francis)
Vera Farmiga (Oana)
Juliette Binoche (Amira)
Robin Wright Penn (Liv)
Martin Freeman (Sandy)

Estreno en Perú: 8 de enero de 2007

Minghella no ha conseguido insuflar energía suficiente a este Breaking and Entering. A pesar de Juliette Binoche, de Jude Law, y de la guapa Robin Wright Penn. Los personajes que interpretan están poco definidos, se muestran borrosos, desdibujados, paseando por aquí y allí con discursos que resultan incongruentes en muchos casos, dando como resultado una cierta esterilidad en el conjunto de la historia.

Breaking and Entering

Abogo porque las películas dejen sus títulos originales, a pesar de su doblaje. Pero puestos a traducirlos, los responsables de tal acción incurren, a veces, en desequilibrios un tanto incoherentes. Cuando hablé a propósito de la traducción del título realizada en España de la película Little Children de Todd Field, me sorprendió la inutilidad de tal hecho, puesto que su denominación en inglés era perfectamente entendible, tanto a la hora de iluminar sobre el contenido de la película, como por la facilidad para captar su significado por aquellos no familiarizados con la lengua inglesa.

Sin embargo el último trabajo del cineasta británico de raííces italianas, Anthony Minghella, Breaking and Entering ha aparecido, quizá debido a las prisas del estreno, de esa guisa anglosajona en los cines. Me parece estupendo familiarizar al personal con el inglés, pero ante otros desbarajustes, como el mencionado, resulta un tanto inexplicable, teniendo en cuenta que es, además una expresión hecha: allanamiento de morada. Como de inexplicables se revisten las intenciones de Minghella con esta pretensión de… ¿cine social? ¿Merienda de metáforas? o ¿visitemos más de cerca a los que nos limpian (entendido limpiar en todos los sentidos)?

Breaking & EnteringPorque de robos va esta cinta. De la asiduidad de los robos en Londres. ¿Quién que haya vivido allí unos años no ha sufrido una entrada indeseada en casa o en la oficina? A mi me tocó ese bautismo de robos, aunque no me arregló la vida, como Minghella viene a decir en su… volvamos a las dudas: ¿drama de crisis matrimonial, dije crisis? Bueno, si entre tanta palabrería hueca de arquitecto yuppie mega-comprensivo (Jude Law) y compañera perdida en vaguedades (Robin Wright Penn), con la guinda de una hija (de ella) un tanto repelente (más que autista), se puede extraer de que va, por fin, esta película.

El cineasta centra la atención en el clásico trío: arquitecto, emigrante, y esposa sueca (también emigrante, pero de los privilegiados). Y juguemos a los “tres en raya“. Tú me robas, yo te coso, y todos reconstruidos. Bueno también aparece algo de tecnología punta, y futuribles construcciones estilo Minority Report. Y entre melifluos juegos sentimentaloides, robos con piruetas de adolescentes y prostitutas filósofas, algunas postales de la ciudad de Londres, ciudad de acero y cristal, pero también de cemento, el de los bloques de protección donde se apiñan los venidos de otros lugares, es decir los emigrantes (pero no los suecos) que intentan reconstruir su vida.

Recordemos que lo más destacable de Anthony Minghella, sigue siendo El paciente inglés, que se ventiló 9 Oscar en 1997. Vale. Aquí coincido en que funcionó el producto oscarizable y comercial y convenció a críticos y bisoños. Tampoco estuvo mal su Talentoso Mr. Ripley (1999), a partil del cual decidió adoptar como hijo predilecto a Jude Law, (nada que objetar a eso, lo comprendemos perfectamente, hasta Francia, que le acaba de nombrar Caballero de las Artes y las Letras). Sin embargo con Cold Mountain (2003), ya le salió la vena muy blockbuster, y lo siento por los amantes de tal género, pero creo que quizá venció, pero no convenció.

Breaking & EnteringNo ha conseguido Minghella insuflar energía suficiente a este Breaking and Entering. A pesar de Juliette Binoche (poco creíble en el papel de refugiada bosnia. Demasiado charm), de Jude Law, que le va al pelo ese papel de arquitecto décontracté y de la guapa Robin Wright Penn. Los personajes que interpretan están poco definidos, se muestran borrosos, desdibujados, paseando por aquí y allí con discursos que resultan incongruentes en muchos casos, dando como resultado una cierta esterilidad en el conjunto de la historia.

Un intento de darle profundidad a la mirada de los privilegiados posada por los, ni siquiera bajos fondos, de esta inmensa ciudad. Si queremos profundidad en los bajos fondos, mejor nos acercamos a Ken Loach o el mismo Frears.

“Yo quería hacer un film en mi lugar, en Londres, y acerca de Londres”, expresa Minghella. Pues eso, postales coloreadas para turistas y bestseller para acompañar con un barril de palomitas.

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Una respuesta

  1. Avatar de Carla Chung
    Carla Chung

    Jude Law es lo unico bueno de esta pelicula…

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