Hoy, celebraríamos el centenario de Katharine Hepburn, si no nos hubiese dejado en el 2003. La zarina del cine fue actriz de carácter, ganadora de 4 Oscar, cuando los Oscar valían de verdad, protagonista de clásicos como Historia de Filadelfia o La reina africana. Mujer apasionada, casada una vez, amante de varios: John Ford, Howard Hughes y luego Spencer Tracy, su amor eterno. Supo combinar cine, teatro y vida, alcanzando la vejez con dignidad.
Hoy, podemos contemplarla en su esplendor, gracias a esa suerte de inmortalidad que es el cine, en los fotogramas de sus más de 50 films, que la atraparon con toda su belleza e ímpetu. ¡Grande la Katha!
Deja una respuesta