«La fecha de fallecimiento del cine es el 31 de setiembre de 1983, cuando el control remoto llegó a la sala de estar», ha manifestado Peter Greenaway en una clase maestra durante el último Festival de Pusan. «Las nuevas tecnologías que tienen el potencial para expandir los límites del cine se han vuelto muy poderosas».
Conocido por filmes como The Pillow Book o El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante, Greenaway siempre se ha caracterizado por su experimentación en la pantalla, que lo han llevado de la pintura al cine, y también al teatro e incluso emprenderla como VJ. Sus declaraciones han resultado incendarias y controvertidas durante esta clase maestra, en la que recibió críticas como las de ser «poco inteligente» o «un fraude».
Greenaway siguó defendiendo su punto de vista indicando que el film (que nació con Eisenstein, se consolidó con Fellini y rompió moldes con Godard) está muerto y necesita una reinvención urgentemente para encajar en las características contemporáneas. y en un plan provocativo aseguró «Bill Viola vale 10 Martin Scorseses, Scorsese está desactualizado y esta haciendo las mismas películas que D.W. Griffith realizaba a principios del siglo pasado».
El director de Prospero’s Book también habló sobre el cine más comercial: «El Señor de los Anillos y Harry Potter no fueron películas, sino lubros ilustrados» y agregó «El cine se basa en la novela del siglo XIX. Todavía estamos ilustrando novelas de Jane Austen -hay 41 filmes sobre las novelas de Jane Austen en el mundo – que desperdicio de tiempo».
Sus búsquedas y motivaciones quedaron manifiestas en su speech: «Cada medio tiene que redesarrollarse, de otra manera todavía estaríamos viendo las pinturas en las cavernas… Mi deseo de contarles historias es muy fuerte pero es difícil porque estoy buscando un cine que no es narrativo» y de colofón añadió, «Treinta y cinco años de cine mudo han pasado, ya nadie lo mira. Esto pasará con el resto del cine. Si disparas a un dinosaurio en el cerebro el lunes, su cola aún se sacudirá el viernes. El cine está descerebrado.» Polémico, cierto o no, un sacudón para pensar en el cine que vemos y las posibilidades del medio.
(Vía Indiewire)
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