Dir. Lois Leterrier | 114 min. | Estados Unidos
Intérpretes: Edward Norton (Bruce Banner), Liv Tyler (Betty Ross), Tim Roth (Emil Blonsky), William Hurt (General Thaddeus ‘Thunderbolt’ Ross), Tim Blake Nelson (Samuel Sterns), Ty Burrell (Dr. Lennord Samson), Christina Cabot (Mayor Kathleen ‘Kat’ Sparr), Peter Mensah (General Joe Greller), Lou Ferrigno (Voz de Hulk / Vigilante).
Estreno en el Perú: 13 de junio de 2008
El nuevo Hulk es una película más convencional que la primera versión. Su estructura consiste en un breve prólogo que, en cierta forma, resume hechos que quedaron en el aire en la primera versión, reubicando al protagonista en tierra carioca. Luego tenemos tres grandes persecuciones intercaladas por escenas de búsqueda y reencuentro del héroe con su amada. Durante las escenas de acción, se va también construyendo a su antagonista, con ayuda de un nuevo personaje que ha venido haciéndole el seguimiento vía email.
El único punto en común entre esta nueva versión de Hulk y la realizada por Ang Lee, es ese candoroso puritanismo que impide la consumación del intenso amor que se profesa David Banner con su bella, aunque un poco tontuela, Elizabeth. Si en la primera versión ni siquiera llegan a juntar sus labios, en esta nueva sí lo hacen e incluso se revuelcan en la cama, pero no pueden ir muy lejos porque el pobre David amenaza con ponerse verde y convertirse en el simpático monstruo que atrae a las audiencias.
Una segunda diferencia a favor del nuevo Hulk son los efectos especiales para construir al nuevo bicho, mucho más cercano al personaje del comic que el poco elaborado trabajo realizado en este punto por el director taiwanés. En mi opinión, salvo este punto, en el resto de aspectos prefiero la versión de Lee que me parece más compleja y arriesgada; aunque ésta tampoco desentona del todo.
Lo que sí me ha gustado en la propuesta de Lois Leterrier es su comienzo, mostrando las favelas de Rio de Janeiro; en impresionante e interminable toma aérea, que no pretende ser algo distinto a lo que realmente muestra: una imagen realista de ese fenómeno urbano en Brasil. A diferencia del último capítulo de la saga de Indiana Jones, aquí se respetan las características físicas de este entorno en el que se ha refugiado nuestro héroe. Se ve claramente que estamos ante una locación auténtica, muy bien aprovechada; lo que contrasta con la absurda mezcolanza de referentes culturales utilizados por Spielberg en su filme.
El nuevo Hulk es una película más convencional que la primera versión. Su estructura consiste en un breve prólogo que, en cierta forma, resume hechos que quedaron en el aire en la primera versión, reubicando al protagonista en tierra carioca. Luego tenemos tres grandes persecuciones intercaladas por escenas de búsqueda y reencuentro del héroe con su amada. Durante las escenas de acción, se va también construyendo a su antagonista, con ayuda de un nuevo personaje que ha venido haciéndole el seguimiento vía email.
Las características de estas escenas de acción son un fuerte contraste entre tomas muy cercanas y planos generales de los combates, contrapuestas de manera muy marcada en el contexto de un montaje fragmentado y pertinente para los fines de una película de entretenimiento.
Finalmente, como defecto podríamos anotar que en la segunda mitad del filme aparecen personajes que se quedan en el aire, y aunque se supone que tendrán continuidad en una futura tercera versión, realmente no llegan a redondear adecuadamente esta –pese a todo- agradable película.
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