El español -nacido en Santiago de Chile- Alejandro Amenábar acaba de finalizar en julio pasado el rodaje de su quinto largo, Ágora, un drama histórico ambientado en el siglo IV en Egipto, que narra la historia de Hypatia (Rachel Weisz), la notable astrónoma y filósofa de Alejandría, y Davus (Max Minghella), un joven esclavo que se enamora de ella, y por otro lado se convierte al floresciente cristianismo. Luego de Los otros, se trata de la segunda película hecha íntegramente en inglés por el realizador, que se ha sumergido con entusiasmo en el antiguo Egipto con su coguionista Mateo Gil y ha declarado su asombro por el virtual olvido en que ha caído ese fascinante mundo, en particular por el cine.

«El empeño de todo el equipo es devolverle la vida con un enfoque hiperralista, conseguir que los espectadores vean, sientan y huelan una civilización remota como si fuera su propia realidad. Me siento inmensamente privilegiado y agradecido por contar con Rachel Weisz en este viaje. Su inmenso talento, su inteligencia y su humanidad ya se están haciendo sentir entre nosotros», ha dicho Amenábar, quien durante quince semanas filmó en la Isla de Malta y tiene previsto estrenar en la segunda mitad del 2009.

(Vía El séptimo arte)