Andrés Wood y Pablo Larraín hablan sobre el cine chileno en el 2008


El cine chileno resulta ser uno de los más interesantes y emergentes de la región, por su reciente «despegue» de producción (no sin ayuda de su Estado) y por la variedad de propuestas. Justamente en este año, el país del sur lleva cuenta de más de una decena de filmes locales estrenados comercialmente. Tras tantos estrenos, y ya con pocas semanas para acabar el año, llega el momento de analizar la coyuntura y la experiencia en Chile durante el 2008, en el que el principal problema fue la falta de convocatoria de público a las salas. De ello se encargan Andrés Wood y Pablo Larraín, directores que este año estrenaron La buena vida y Tony Manero, respectivamente, hace pocos meses. Modera la conversación el crítico Héctor Soto. Escúchenlos:

Aún con posturas diferentes frente a su trabajo, Larraín caminando hacia el cine de arte: «No estoy para nada de acuerdo con dogmatizar el cine como una actividad masiva, el cine para mí es artístico» y Wood enrumbado hacia la veta más comercial: «La película uno la hace para los amigos, ahí están incluidos la familia y el país, es super complejo hacer cine para el extranjero.» Sus conclusiones confluyen en la necesidad de (más) apoyo del Estado; de tomarle el pulso, la sintonía, al público; y tener expectativas reales de la capacidad de convocatoria de sus cintas.

Es interesante que estas conclusiones puedan resultar diagnósticas, también, de otras cinematografías de Sudamérica como la colombiana, la ecuatoriana o nuestro cine peruano. Tras el estreno (inusual) de cinco cintas nacionales en seguidilla en este 2008, seguramente nos tocará hacer un balance similar.

(Visto primero en La Tercera, video en PoliticaStereo)


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *