Esto es lo que suele ocurrir con las películas que abordan personajes y/o temas controversiales. Ambos bandos las rechazan de antemano, incluso sin haberla visto. Así sucedió con el director del Festival de La Habana, Alfredo Guevara, aunque finalmente el díptico de Steven Soderbergh ha llegado a proyectarse en ese espacio emblemático del cine latinoamericano, y ha recibido elogios de la prensa cubana para Benicio Del Toro, en el rol del célebre «Che» Guevara, aunque no ha pasado lo mismo con Demián Bichir, quien encarna a un joven Fidel Castro.
En cambio, en Miami la comunidad cubana salió a las calles a protestar, incluida la alcaldesa de Miami Beach, Matti Herrera, contra la exhibición de El argentino y Guerrilla, filmes que consideran «una afrenta al exilio» y «una infamia». No la han visto, pero se dieron el trabajo de ir hasta el mismo cine Byron Carlyle, donde tuvieron un cruce de palabras con el director y los actores protagonistas.
«Es una infamia y tenemos el deber de manifestarle al gobierno estadounidense y a todos los que sean oficiales electos, que la comunidad cubana no va a seguir tolerando agresiones. Aquí no se puede herir la sensibilidad del pueblo», dijo Miguel Saavedra, dirigente de la organización Vigilia Mambisa. «Siento una pena enorme de que esto suceda donde soy alcaldesa, no ha debido ser así», expresó Herrera.
La policía se vio obligada a contener a los manifestantes, que enarbolaban banderas cubanas y pancartas en contra de la proyección de las cintas. Al ingresar el elenco al cine, los exiliados cubanos hostilizaron a Soderbergh y Del Toro, y también a Rodrigo Santoro y Santiago Cabrera, que interpretan a Raúl Castro y Camilo Cienfuegos, respectivamente.
En un acto que quizás aumente la polarización, en los próximos días las principales figuras del díptico viajarán a Cuba para presentarse en el Festival de La Habana.
Actualización, 7 de diciembre, 12:07 p.m. Vean el informe sobre la protesta en Miami que hizo América Teve – Canal 41.
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