Cannes 2009: Primeras críticas de «Altiplano»

Se acaba de presentar en «La Semana de la Crítica» del Festival de Cannes Altiplano, el filme belga protagonizado por Magaly Solier y dirigido por los esposos Peter Brosens y Jessica Woodworth.

Variety publica una reseña, anotando que el tono lírico y ‘arty’ del filme no le permite redondear una narración fluida. Destaca sí las actuaciones de la iraní-alemana Jasmin Tabatabai y de Magaly Solier:

Luego de su debut «Khadak», los cineastas Brosens y Woodworth viajan al interior del Perú andino, en la hiperestilizada «Altiplano». Habrá quienes apreciarán la historia de un doctor belga y su esposa fotógrafa, envueltos en un incidente en una mina local. Pero toda la imaginería simbólica, sonido sobresaturado y diálogos serios, no ayudan a que la historia sea algo más convincente. El sólido reparto y algunos momentos técnicamente impresionantes podrían enganchar algunos distribuidores que buscan precisamente este tipo de filmes de autor.
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Los directores hacen más elusiva la comprensión de su película, saltando de una escena a otra sin hacer necesariamente alguna conexión, especialmente en la primera parte del filme. Más adelante, la historia se ve repleta de simbolismos genéricos (fotos de víctimas flotando en el agua, una cama en la mitad del desierto, un ciego tallando una estatua de la Virgen María) o líneas como «Sin una imagen, no hay historia». El resultado se siente más eurocéntrico que auténticamente andino.

Extra: Altiplano contiene algunas escenas inspiradas en el documental peruano Choropampa, el precio del oro, que cuenta la historia del pequeño poblado que sufrió un derrame de mercurio el año 2000. La Solier habló en Cannes sobre este hecho real que, en la película, desencadena los eventos dramáticos:

«Con las autoridades va a haber problemas, porque los dueños de las minas son gente de mucho dinero y supongo que por eso el gobierno los trata con seda. No defienden a la población, sino a los dueños de las empresas mineras», aseguró Solier en entrevista con DPA.
«Le van a dar duro a la película, pero ahí estamos para defenderla», agregó.
Para Solier esta temática se aborda poco porque el «Perú tiene miedo de tocar la realidad».
«Si hacen películas peruanas, hacen películas que tengan mucho sexo porque tiene más ‘rating’ y más espectadores, pero si se trata de un tema como ‘Altiplano’ la gente va a saltar al toque», señaló.

Aquí tienen la reseña aparecida en el sitio belga Nieuwsblad sobre lo que fue la presentación de la película:

Altiplano es una película lírica sobre la trágica muerte de un oftalmólogo. Él trabaja cerca de un pueblo que sufre toda clase de inconvenientes a causa de la actividad de una mina. «En los ’80 viví en el Ecuador», dice Peter Brosens durante las preguntas de la audiencia, «y antes de empezar a rodar hicimos mucha investigación especialmente en el campo cultural, a través de contactos con la población. Toda la historia es ficticia, pero se conserva cerca a la realidad. Sobretodo Magaly Solier, que interpreta a uno de los personajes principales.

Cineuropa publica este comentario:

Esta ambiciosa película tiene como punto de partida los escándalos en los confines del mundo contemporáneo. El filme quiere mostrar los mortales efectos del colonialismo económico en Latinoamérica y sumergirse en la espiritualidad de las fuerzas de la naturaleza o la religión a través de las trágicas experiencias de simples habitantes del planeta. El estilo narrativo de Altiplano es una mezcla de realismo, simbolismo y una poesía casi sobrenatural (haciéndole un guiño a La montaña sagrada, de Alejandro Jodorowsky), enfatizado por unos efectos visuales muy impactantes: flashback en blanco y negro, imágenes de vídeo, giros de la cámara, majestuosos decorados y una magnífica fotografía obra de Francisco Gozon. Una película que no tiene miedo de correr riesgos, ya que no busca la unanimidad entre los espectadores a los que ciertas tomas de partido en algunas escenas podrían desconcertar.