Ahora sí, que no se diga que no se puede. Mark Price es un galés de 30 años que desde hace más de tres años comenzó a trabajar la idea de una película con solo sus recursos personales. El resultado final viene llamando la atención de muchos puesto que el costo oficial de la cinta, o más bien dicho del rodaje, es apenas de unas 45 libras (50 euros ó 70 dólares). Price, empleado de una empresa de mensajería ya ha conseguido que Colin, su baratísima realización, se estrene a partir de octubre en varios cines de todo Reino Unido.
La cinta se inscribe notoriamente en el cine de zombies y narra las andanzas del personaje del título, interpretado por el actor Alastair Kirton, un joven que es mordido por una de estas criaturas y que, convertido en uno de ellos, comienza a recorrer las calles encontrándose con todo tipo de bravucones, vagos y demás que harán su entretenimiento y posible menú. Casi toda la película se desarrolla desde la perespectiva del protagonista, una idea por lo general poco explotada por la vertiente. Tras el rodaje, desarrollado solo con dos cámaras caseras y la participanción de algunos amigos en calidad de actores, Price tuvo que invertir 18 meses para la edición, utilizando una computadora de su oficina.
Por lo pronto Colin ya tiene asegurada su participación en el Festival de Sitges. Mientras sque su creador sigue incesantemente con su pequeña campaña publicitaria a través de las redes sociales de internet como MySpace . Vean el pequeño avance. El filme ha generado críticas positivas entre los amantes del cine de terror, que parece ser una de esas bizarras delicias que asoman de cuando en cuando por el universo de los géneros.
(Vía El País)
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