El comediante de mayor éxito en el cine estadounidense, después de la época feliz de Jim Carrey, es también uno de los más talentosos, a pesar de que suele casi siempre complacer el gusto masivo por la llamada «sal gruesa». Y es que Adam Sandler puede pasar a convertirse en toda un fetiche de la crítica como en su papel del torpe y rebelde Barry Egan en Punch-Drunk Love de Paul Thomas Anderson, o puede salirse un poco de su habitual registro de bufón en películas convencionales pero efectivas como Anger Management o The Longest Yard.
En la onda que lo ha rankeado más, parece estar el próximo proyecto en el que se involucrará. Se trata de Jack and Jill, una comedia romántica cuya trama partirá de la idea de ver a nuestro héroe convertido en los dos personajes a los que alude el título, dos hermanos gemelos de distintos sexos, que se meten en más de un enredo, pero que, conociendo a Sandler, no dejará de tener su moraleja final.
Como que esto suena a algo más cercano a lo que suele ofrecernos su amigazo Rod Schneider, o también uno podría imaginarse en esos papeles a Shawn y Marlon Wayans (ya saben cual haría de mujer), pero al parecer Adam piensa hacer la prueba y volver a dejar bien parado el transformismo entre los comediantes de Hollywood luego de la infame Norbit, estelarizada por Eddie Murphy.
Esta nueva película de Sandler está prevista para estrenarse todavía el año 2011. De momento, la estrella se encuentra involucrada en el rodaje de Grown Ups, donde comparte protagonismo con Kevin James, Chris Rock, Salma Hayek, y Maria Bello, entre otros; y también en prestarle la voz a uno de los animales de Zookeeper. Ambas llegarán a los cines el próximo año.
(Vía The Guardian)
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