Los pishtacos peruanos han dado la vuelta al mundo esta semana que pasó de la mano de la Policía Nacional. La historia de estos robagrasa, son parte -como bien han indicado ya en varios blogs– de la creencia andina, y justamente por ello, no podían dejar de ser parte del imaginario del cine peruano, en el cine regional. Aquí una pequeña revisión -y aporte a las hipótesis de nuestros CSI- de las apariciones de estos malignos seres en las pantallas cinematográficas.
Pishtaco (2003) de José Martínez
En 2003, con la aparición del Jarjacha de Eusebio y el de Ortega, se comienza a formar una movida de cine de terror en el ande peruano, sobre todo en Ayacucho, zona que parece hacer eco y catarsis del terror senderista a través de su cine. Ahí incursiona, de manera natural, Pishtaco de José Martínez Gamboa, cinta de la que podemos encontrar fragmentos en distintas versiones en youtube. Avezados y curiosos, dénle en el link de la mula. Aquí, el inicio de la cinta:
Nakaq (2003) de José Gabriel Huertas
La más difícil de encontrar de los filmes de pishtacos, con apenas una referencia en Internet, y las noticias de un VCD que nunca llegamos a ver, es la del ayacuchano José Huertas. Esta vez, bajo el nombre de «Nakaq» (el degollador), el relato pasea al ladrón de grasa por parte de la selva y ande peruano, donde mata y perdona vidas por igual, pero cuando se descubren los cadáveres de sus víctimas, comienza la aventura. Queda registro en la foto y el link ed2k.
El misterio del Kharisiri (2004) de Henry Vallejo
Probablemente la más lograda de las películas puneñas, se adscribe al tema a través del brujo o hechicero caníbal y el secuestro de una reportera para un sacrificio pagano. Su camarógrafo, enamorado platónico de la señorita, irá a su rescate con la ayuda de un viejo habitante de la zona. Un inicio de muy buen timing, locaciones espectaculares y un clímax con enfrentamiento chamánico «a lo matrix», son algunos de los valores de la opera prima de Henry Vallejo. Un avance, a continuación:
Sangre y Tradición (2005) de Nilo Inga
El huancaíno Nilo Inga, sin mencionarlo en el título, también se juega por el relato sobrenatural, y enfrenta a una pandilla de pishtacos contra el amor «más allá de la muerte» de una pareja, en medio de danzas tradicionales y fiestas patronales. Este es el tráiler:
Deja una respuesta