La isla siniestra (2010)


Los escenarios colosales de Shutter Island

Martin Scorsese es uno de los cineastas que más admiro y quiero. La isla siniestra, lamentablemente, me ha dejado un sinsabor, creo que es una de las películas menos logradas de su autor y un aviso preocupante de agotamiento expresivo, luego de un filme como Infiltrados, que ya tenía sus altibajos.

El diseño de producción exuda laboriosidad, la edición busca el estrépito, el despliegue de dirección artística y locaciones se esfuerza en crear una atmósfera recargada, llena de misterio y locura, en la que proliferan las conspiraciones y se puede desconfiar de todo(s). La penumbra se instala en dormitorios, salones, fachadas, arrecifes, faros, autos, celdas y pasadizos, y es subrayada por el elemento externo de la emergencia climatológica.

Precisamente, ese es el problema, quizás provocado hasta cierto punto por el doble rol de Denis Lehane, autor de la novela Shutter Island (2003) y productor ejecutivo de la cinta. El look de «gran producción» estorba mucho, porque carga la puesta en escena de algunos efectismos que, hace tiempo, han convertido buena parte del thriller y el terror hollywoodenses en una masa de estridencias sin pausa que se aplican de modo intercambiable y mecánico. Scorsese se contagia de ese tratamiento, por lo que en esta ocasión queda menos distante de las coordenadas del mainstream y su sello autoral se desvanece como la conciencia del personaje de Leonardo DiCaprio.

Ojo con los spoilers. Para un director del nivel de Scorsese, no es una leve deficiencia la acumulación de referentes de contexto como la Segunda Guerra Mundial, el Holocausto y la atmósfera persecutoria de los años 50; el enredo artificial del relato y la resolución de simples anagramas de nombres y apellidos; la voltereta de la demencia por la lucidez; la permuta de hechos claves de la vida del protagonista. Son viejas maniobras narrativas que, más que trucos, ya saben a vicios, a recursos que se sacan del sombrero para suplir la falta de claridad en el tratamiento del proyecto y la dificultad de encontrar su esencia.

Shutter Island. Dir: Martin Scorsese | 139 min. | EE.UU.

Intérpretes: Leonardo DiCaprio (Teddy Daniels), Mark Ruffalo (Chuck Aule), Ben Kingsley (Dr. John Cawley), Michelle Williams (Dolores Chanal), Patricia Clarkson (Rachel), Max Von Sydow (Dr. Naehring), Jackie Earle Haley (George), Emily Mortimer (Rachel).

Estreno en España: 19 de febrero 2010.

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7 respuestas

  1. Avatar de curiosidad
    curiosidad

    oigan me encanto esta peliculaa de la isla siniestra es perfecta pero pliss diganme cuando saldra la segunda parte quiero saber plisss

  2. Avatar de Andy
    Andy

    la pelicula me parecio excelente, me dejo intrigas y emocion de principio a fin. no me pondre a opinar de manera tan detallada porque no soy critica, pero si pertenesco al comun denominador de espectadores, que no analizamos a tal punto, y puedo decir que la aplaudo de pie. EXCELENTE.

  3. […] quienes no quedamos satisfechos con La isla siniestra de Martin Scorsese, esta noticia nos viene bien. Entre fines de los años 50 y principios de los […]

  4. […] es un fracaso luego de Los abrazos rotos, que a Scorsese empieza a sentírsele el cansancio en La isla siniestra, que Woody Allen destila senilidad en Vicky Cristina Barcelona o que Wenders decretó su muerte […]

  5. […] es un fracaso luego de Los abrazos rotos, que a Scorsese empieza a sentírsele el cansancio en La isla siniestra, que Woody Allen destila senilidad en Vicky Cristina Barcelona o que Wenders decretó su muerte […]

  6. Avatar de
    Anónimo

    hola.
    vi la película y me gustó mucho, primero porq es un tema casi nuevo para M. S. se pudo ver algo de suspenso en cabo de miedo, pero aca entra a otros terrenos, no me atrevería a comparar con toda su filmografía, q es definitivamente de otro tono, simplemente creo q este es un terreno nuevo para él y definitivamente no lo hace nada mal
    yo voto por la peli q es super buena, en total desacuerdo con la crítica

  7. Avatar de Nadie
    Nadie

    Creo que el tratamiento visual de esta película es su peor enemigo. La fotografía, igual que en los infiltrados, es poco naturalista, esta muy alumbrada y los colores aparecen muy brillantes y saturados (nada que ver con taxidriver). La composición digital es otro artifico que molesta, esos cielos, esos fondos, se notan que han sido retocados o reemplazados.
    Por otro lado creo que el ritmo de la película y el tono de la actuación de di caprio no son los más adecuados. Un ritmo más pausado, una actuación más contenida , un clima más naturalista hubieran resultado más interesantes, menos artificiosos.
    Se confirma además, con los flashbacks del personaje de di caprio y con la aparición final del personaje de mark ruffalo, que el protagonista esta «chiflado» lo cual me parece un error. Lo interesante era que el espectador quede pensado: ¿cuál de las dos historias es real? ¿El protaginista esta loco? o es la isla verdaderamente un lugar de experimentos sinietros ?

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