Por estos días ha llegado a Lima VideoXXI, la Colección Lemaître, de Jean-Conrad e Isabelle Lemaître, coleccionistas privados, cuya selección de obras de videoarte es muy reputada a nivel internacional. La muestra comenzó el 8 de julio y va hasta el 3 de octubre, en el MALI y en el Centro Fundación Telefónica.
El pasado lunes 12 estuvieron ambos, Jean-Conrad e Isabelle Lemaître, en Fundación Telefónica presentando las nuevas adquisiciones de su colección, una selección de siete videos de gran nivel, provenientes de China, Chile, Alemania, Francia y EE.UU.
Yo me quedé impresionado con uno en particular: Brises (Brisas), de Enrique Ramírez. Una película en un plano secuencia de 10 minutos que presenta a un caminante. Recordando años pasados, años duros de la vida política y social en Chile, recorre calles santiagueñas, para luego atravezar, de manera simbólica, el Palacio de La Moneda, la casa de gobierno de ese país.
Al verlo pensaba que obras así son necesarias también en nuestro país, obras que se puedan alojar en el tan esperado y mentado Lugar de la Memoria. Véanlo:
Brises forma parte de Instalación que Enrique Ramírez presentó el 2009 en la Galería Gabriela Mistral. Dice el director: «Si una persona desea hacer el camino ‘turístico’ en el Palacio de La Moneda se encontrará a la salida con la Plaza de la Ciudadanía -construida hace cuatro años-, a la cual no se puede entrar libremente, ya que se mantiene enrejada. Supuestamente ésta fue realizada y creada como un espacio público por donde se pudiera transitar, ¿no era así la historia?, ¿no se puede mirar hacia atrás?».
Se presentó también al concurso de cortometrajes del Festival de Rotterdam 2009, esta fue la entrevista que le hicieron a Ramírez.
Extra: Un tema interesante surgió en la presentación del lunes. En la conversa con los coleccionistas, en un momento Alfredo Vanini preguntó a los Lemaître cómo reaccionarían -ellos o cualquier otro coleccionista privado- si vieran algun video que ya han comprado, o que desean adquirir para su colección, colgado en YouTube. Los franceses dieron a entender que los coleccionistas no verían con buenos ojos que sus videos, que les costó dinero adquirir, sean de dominio publico.
Por otro lado, en esta entrevista publicada por El Dominical, los Lemaître se refieren de alguna manera a ese tema:
Coleccionando múltiples (materiales que son reproducibles) seguramente no es la forma correcta para los coleccionistas quienes quieren tener ese objeto único. Cuando la gente dice que es duro controlar el número de copias en el mercado, y que esto afecta el valor de la pieza, uno podría responder que ellos no son el único tipo de múltiple en el mundo del arte. Imprentas siempre han sido múltiples. Andy Warhol hizo múltiples y tú puedes hacer un número infinito de impresiones de un negativo o archivo digital. Así que, el video no es una excepción aquí y, visto simplemente en esta luz, es claramente una forma de arte en armonía con estos tiempos. Cuando el primer video apareció en el mundo del arte, en los sesenta, no hubo reglas precisas, pero cuando esto se hizo parte del mercado, alrededor de dos décadas después, hubo un proceso de estandarización. Hoy, los trabajos de video son grabados en un soporte estable, Beta Digital, y por cada uno hay un certificado de artista definiendo el número de copias en circulación. Por estas razones, no pensamos que el video perderá valor al pasar el tiempo.
Y ahora encontramos el trabajo del chileno Ramírez íntegro en Vimeo.
Extra 2: Un extracto de otro video que vi ayer en Fundación Telefónica, Under Construction, del chino Zhenchen Liu. Filme de denuncia, hecho con animaciones 2D, muy eficaz, y muy recomendable.
Deja una respuesta