Amante accidental es el quinto largometraje del todavía joven Bart Freundlich, el esposo de Julianne Moore, su intérprete más frecuente en una filmografía que nuevamente incursiona en la comedia romántica, como en su opera prima The Myth of Fingerprints (1997) y Trust the Man (2005).
Esta vez el rol de la mujer madura recae en Catherine Zeta–Jones, una actriz que acaba de superar los 40 años y que no se prodiga mucho, optando por pausas de dos años sin actuar en películas. Ella encarna a Sandy, la periodista deportiva que viene de un matrimonio concluido abruptamente por la infidelidad de su esposo y que trata de rehacer su vida en New York, con un niño y una niña de corta edad. Mientras tanto, el joven Aram (Justin Bartha, actor de National Treasure), que también espera la separación legal de una francesa que tramposamente se casó con él sólo para adquirir la nacionalidad norteamericana, busca igualmente tomar nuevos rumbos en la Gran Manzana.
Entonces Freundlich, que también escribe el guión y coproduce la cinta, va dosificando el encuentro entre las urgencias del subempleo de Aram y la catarsis de Sandy, con vistazos, extravíos y reencuentros, en la explosión femenil física y verbal contra el objeto masculino que representa sus traumas, y la distendida relación con quien primero funciona como niñero y luego se convierte en nuevo compañero. La fórmula boy meets girl presenta una variante: la iniciativa es de la mujer mayor –en el estilo que, no sin polémica, últimamente llaman cougar, o sea «puma», con connotación de cacería–, por más errática y conflictuada que esté.
La película es amena y no tiene grandes pretensiones, pero se da maña para narrar con corrección, permitir que los intérpretes se luzcan hasta cierto punto y jugar con los roles de jerarquía ligados a la edad, la experiencia laboral y el nivel económico, aunque como le ocurre a las protagonistas de El cazarrecompensas y Plan B, recientes comedias románticas protagonizadas por dos Jennifers, Aniston y López, la autonomía profesional y financiera va de la mano de la inseguridad personal y los actos fallidos. Al punto que Sandy opta por abortar sin mayor trámite la relación, temerosa frente al futuro y la falta de proyecciones aparentes de Aram.
Ante cierto agotamiento de ideas, Freundlich abandona el vínculo principal y despliega una coda más o menos prolongada donde transcurren los años, en un montaje paralelo que combina pasajes del ascenso de Sandy y la labor social de Aram por diferentes países del mundo. Es el preámbulo para un reencuentro que no agrega al filme más que una amable sonrisa.
Dir: Bart Freundlich | 95 min. | EE.UU.
Intérpretes: Catherine Zeta-Jones (Sandy), Justin Bartha (Aram Finklestein), Art Garfunkel (Harry), John Schneider (Trevor), Lynn Whitfield (Laura), Jake Cherry (Frank Jr.), Andrew Cherry (Frank Jr.), Samantha Ivers (Cinnamon), Kelly Gould (Sadie).
Estreno en España: 30 de julio de 2010.
Estreno en el Perú: 12 de agosto de 2010.
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