La pregunta del millón es: ¿crecimos a lo largo del 2018? Puesto en contexto el “año record” de la taquilla del cine peruano, es momento de responder a esa pregunta y dar un juicio definitivo sobre si tuvimos o no un buen año.
El primer artículo de este análisis de la taquilla del cine peruano en 2018 cumplía la difícil función de poner en perspectiva las cifras finales de un año, a todas luces, exitoso y sin precedentes. Si bien ese ejercicio pudo resultar antipático y hasta deliberadamente alarmista, era necesario para comprender la relevancia y participación de un género y una empresa en el éxito de nuestro mercado cinematográfico y dar el primer paso para comprender las proporciones reales de nuestro crecimiento anual.
Habiendo cumplido esa primera tarea, llega el momento de responder a las preguntas ¿creció la taquilla cinematográfica a lo largo de 2018? y ¿podemos llamarlo un buen año para el crecimiento de la asistencia a cintas nacionales? La respuesta se encuentra en el siguiente cuadro:
Nota: El estimado anual de taquilla esperado se calcula de la siguiente manera: se toma el total de espectadores “reales” (sin el taquillazo) del año previo (en este caso del 2017), esto se divide entre la suma de estrenos reales de ese año sin contar el taquillazo (en este caso 24). El resultado de esa operación se multiplica por la cantidad de estrenos del año actual (en este caso los 35 estrenos estimados), el resultado de esta operación será el promedio de espectadores que se espera obtener en el año.
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La respuesta concreta a la primera de las dos preguntas previamente expuestas es sí, ha sido un año de crecimiento para la taquilla del cine peruano. El ejercicio expuesto en el artículo previo (en el que retirábamos a la película más taquillera del año para tener un panorama “real” de nuestro mercado) se replica año a año para la realización de este cuadro, en el que la línea roja representa nuestra “asistencia real” (siempre sin contar el taquillazo del año) y la línea azul los estimados de asistencia anuales que debemos superar. Como se observa, el año pasado tuvimos una asistencia superior a la esperada y superior (por alrededor de 70 mil espectadores) a la del 2017.
¿Cómo un año en el que casi un tercio de la taquilla se la debemos exclusivamente a una película y la mitad de esta a un solo género puede haber logrado marcar un quinto año de crecimiento en nuestro mercado cinematográfico? Para comprenderlo hay que volver a uno de los cuadros del primer artículo, aquel en el que observábamos la taquilla por casa productora sin contar a “Asu Mare 3”.
¿Por qué es importante observar este cuadro? Porque en él se encuentra el verdadero gran logro del cine peruano en el 2018. No fue un gran año solo por haber tenido un estreno de más de 2 millones de espectadores, sino porque se consiguió que 9 casas realizadoras amasaran taquillas de 6 dígitos cada una. Es ahí donde radica el verdadero valor de nuestro crecimiento y donde se explican las cifras positivas de este año: el grueso de nuestra taquilla se construyó gracias al acumulado que 9 de las 10 casas productoras más exitosas nos brindaron.
Es más, tal como se explicó en el artículo anterior, viendo el cuadro de estas cifras sin “Asu Mare 3”, se puede observar un mercado mucho más balanceado, saludable y competitivo. Son este tipo de medidores los que debemos siempre observar para poder emitir un juicio sobre el éxito de nuestra taquilla anual y esta clase de cifras a las que debemos aspirar para poder tener un mercado mucho más parejo y competitivo. Un mercado en el que el taquillazo del año brinde oxígeno a las demás películas para que sus buenas taquillas sean las que superen el estimado de asistentes anuales que se tenía registrado.
Habiendo establecido que el año que nos dejó fue uno de crecimiento para nuestra taquilla, responder si este fue o no positivo podría resultar redundante; sin embargo, convendría analizar a detalle ciertos indicadores generales que pueden ofrecer un vistazo acerca de la magnitud positiva que el 2018 tuvo en la taquilla del cine peruano.
El primero que llama a la atención es el registro total de espectadores al cine en el Perú, el cual ha presentado su primer declive en dos décadas de registro. Ya para el año 2017 se había observado una desaceleración en el conteo general de espectadores (el cual llegó a 51,785,998, tan solo 700 mil espectadores más que el 2016), pero el 2018 consumó su primer descenso, registrando un total de 50,466,795, es decir 1.3 millones de espectadores menos que el año previo. Esta variación en el macroambiente de los espectadores debe ser investigada por su lado para poder comprender sus causas y ramificaciones, pero lo que nos atañe inmediatamente es saber cómo esta afecta a nuestra taquilla local. De momento, se puede decir que la afecta positivamente.
La relevancia principal de la taquilla general anual se puede observar en el porcentaje de asistencia a cintas locales, que logró su cifra más alta desde el 2013 y se mantiene por encima del 10%, ubicándonos incluso por encima de países como Colombia o Chile, quienes cuentan con industrias cinematográficas más desarrolladas y leyes de cine superiores a la nuestra.
Esta cifra cobra un valor aún mayor cuando se pone en perspectiva frente a nuestro porcentaje de películas locales estrenadas, el cual alcanzó en 2018 su cifra más baja desde 2013, tan solo 6% de las películas estrenadas en el año fueron películas peruanas y, a pesar de ello, lograron amasar el 14% del público y lograr atraer una cifra histórica de espectadores.
Tomando en consideración lo expuesto, puede decirse con certeza que el 2018 fue un buen año en general para el mercado del cine peruano. Contando con la cantidad de estrenos más baja de los últimos 3 años (23) y el porcentaje de estrenos peruanos más bajo desde 2013, se logró un mayor porcentaje de asistencia a películas peruanas frente al total del año, la taquilla general más alta que se haya registrado y un tercer año de crecimiento sostenido por encima del total esperado de asistentes.
Habiendo cerrado un año de crecimiento y con saludables indicadores, ¿qué se puede esperar del 2019? Si bien el mercado cinematográfico peruano es sumamente variable (coqueteamos con un año funesto y de pronto levantamos todas las cifras en un mes), lo que aguarda en el presente año es una tarea que bordea lo imposible a causa de los 35 estrenos locales que se tienen agendados. Si bien esta cifra puede variar, una cantidad tan alta de películas crea una asistencia esperada de más de 7 millones de espectadores, la cual se ve casi inalcanzable incluso cuando se tendrían más estrenos locales que en los pasados 20 años.
Considerando que nuestro crecimiento parece encontrarse en una meseta y que se requeriría de una cantidad histórica de espectadores para lograr la meta anual, es muy probable que el 2019 no sea un año en el que se supere el promedio esperado de asistentes (menos aún cuando en los primeros dos meses del año las cifras de cinco de esos 35 estrenos han sido bastante austeras). Luego de nuestro “año récord”, el presente año muy posiblemente será uno de crecimiento austero, en el que el indicador principal a observar será el de nuestra taquilla real, la cual debería mantenerse por encima de la del 2018 para así mantenernos dentro de la meseta actual de crecimiento y no dar señal alguna de un declive que pueda acrecentarse en el futuro.
Con esto en mente, se observarán las cifras que el cine peruano nos deje en este nuevo año, con la esperanza de lograr nuevamente batir todas las expectativas y sorprender a los análisis y presunciones tal como ha logrado hacerlo año tras año desde el 2013.
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