[Entrevista] «Larga distancia», de Franco Finocchiaro: La eterna adolescencia

La sección «Irresistibles» del Festival de Lima incluirá este año una película peruana, «Larga distancia», el primer largometraje de Franco Finocchiaro. Protagonizado por Miguel Iza y la debutante Valquiria Huerta, este filme nos presenta una historia de autodescubrimiento: la de un padre en plena crisis de la mediana edad, y la de su hija, una millennial ensimismada y solitaria. Con un espíritu lúdico y juvenil, este dramedy se nutre de referentes de la cultura popular para brindarnos una fresca mirada a las relaciones interpersonales en estos tiempos de exceso de información y falta de conexión.

Sinopsis: ¿Astronautas, vampiros y monstruos gigantes que destruyen ciudades? ¿Qué tienen en común estos personajes? Miguel. Un oficinista que tiene su vida en pausa desde que Isabel, su esposa, lo dejó. Sin embargo, él prefiere decirle a todo el mundo que se trata de una separación temporal. Pasa los días en un departamento con su hija Camila, una adolescente retraída a la que trata de acercarse pero que nunca logra comprender del todo. En su centro de labores se anuncia que se premiará con dos pasajes a cualquier parte del mundo al trabajador con mayor cuota de ventas a fin de año. Miguel se propone ganar este premio para salvar su trabajo e ir donde Isabel. Por otro lado, Camila está desinteresada en el patético sueño de su padre mientras navega un torpe e inocente triángulo amoroso entre un desgarbado skater y su mejor amiga.

Conversamos con el joven realizador, semanas antes del estreno de su ópera prima:

Franco, tu película aborda diversos temas, la relación de padre e hija, la complicidad y libertad del espíritu adolescente, los conflictos propios un hombre de mediana edad. ¿Por qué te interesaba explorar estas situaciones?

Crecí en casa de mis abuelos conviviendo con muchos familiares y fui el primero de todos los nietos así que la mayoría del tiempo la pasaba entre adultos. Andaba atento a sus conversaciones y, sin saberlo, a sus conflictos. Por otro lado, la adolescencia siempre me ha interesado muchísimo, tanto temática como audiovisualmente. Desde mis libros favoritos, las películas de género coming of age y hasta la música que escucho. La mayoría de ellos giran en torno a personajes que se andan descubriendo. Eso es lo que le sucede a Miguel (Miguel Iza) en «Larga distancia», que por más que sea un hombre de 50 años tiene los mismos conflictos de un adolescente, y a Camila (Valquiria Huerta) que es una adolescente pero intenta afrontar todo como si fuese una persona adulta. 

Nuestra generación parece condenada a vivir una adolescencia eterna: vivimos rememorando e idealizando los años de nuestra niñez y primera juventud. ¿Sientes que tu película interpela de alguna manera a ese «eterno adolescente»?

Creo que sí. Varias veces me he visto de esa manera aunque ya no me comporte como un adolescente. Siento que mi adolescencia acabó a los 24 años, que fue exactamente el momento en el que empece a escribir el guion de «Larga distancia». No podría explicar porqué sucede esto pero siento que una gran parte de mi generación se siente así.

La película tiene secuencias en las que se sale de la realidad de la historia y, por ejemplo, viajas al espacio exterior, o al interior de películas clásicas. ¿Cómo surgieron esos recursos dentro de la narrativa que planteas en tu película?

Siempre me ha gustado mucho la cultura popular y creo que eso es lo que refleja la estética de la película. Vampiros, skate, Gojira, Sailor Moon, música, Facebook, pilotos intergalácticos, caricaturas… son demasiadas cosas. Eso es lo que refleja el poster de la película, por ejemplo.

En el caso de las referencias cinematográficas pertenecen sobre todo al universo de Miguel pues son mucho más antiguas. Aquí tengo que dar crédito a Jorge Ossio Seminario, coguionista de la película. Jorge es un tipo muy talentoso y con un conocimiento cinematográfico increíble. Sin duda su trabajo potencio el guion, hemos seguido trabajando el texto hasta casi a un mes después de cerrar el montaje pues la película en todas sus etapas ha ido mutando. Creo que eso es justamente lo que la hace una peli viva, fresca y sincera. 

Este es el primer protagónico en cine de Valquiria Huerta, y comparte escenas con el más experimentado Miguel Iza. ¿Cómo fue el proceso de casting de ella y del resto de actores?

Yo estoy feliz con el trabajo de todos los actores en la película. Una de las cosas mas bonitas que tiene el cine es que te da la posibilidad de trabajar con gente que siempre has admirado. Por ejemplo, con Germán Gonzáles que tiene un pequeño papel en el cual hace de una especie de Abraham van Helsing, o con Denise Arregui a la cual solo vemos unas cuantas veces por Skype.

Valquiria en la película hace de Camila, una adolescente retraída y no tiene muchos diálogos. Ahí estaba el reto. Creo que con la mirada Valquiria ha logrado transmitir todo lo que el personaje necesitaba, y las pocas veces que dice algo lo hace con tanta fuerza que impacta. Su personaje pasa de un lado inocente a uno muy duro de un momento a otro.

Con Miguel Iza trabajo desde que hice «Educación física» en el 2012, su personaje en «Larga distancia» estaba escrito para él. Por eso se llama Miguel. Con él hemos llegado a un entendimiento en el cual podemos ensayar poco y sabemos igual qué estamos buscando. Es sorprendente porque, cuando mandas acción, muy pocas veces (o tal vez ninguna) Miguel se equivoca.

¿Cuáles son algunos referentes, de películas u otras obras, que tuviste al momento de escribir y rodar la película?

Recuerdo que cuando empece a escribir la película estaba obsesionado con “Todas las canciones hablan de mí” de Jonás Trueba. Me gustaba mucho la simpleza con la que contaba la historia. Además, siempre me gustaron los personajes tristes, introspectivos o con el corazón roto. Otra película que también tome mucho de referencia es “The Squid and the Wale” de Noah Baumbach, sobre todo por el tema de los conflictos familiares y las relaciones interpersonales. Recuerdo que durante la escritura del guion y el rodaje leí muchas veces “El pasado” de Alan Pauls. Creo que esa novela y la manera en la que su protagonista se enfrenta a esa “nueva vida” es muy similar a la de Miguel.

La música también destaca nítidamente y ayuda a crear la atmósfera de la película. ¿Cómo fue ese trabajo con Karin Zielinski?

Yo siempre pensé en una película con mucha música. Con Karin ya habíamos trabajado antes pero nunca en un proyecto cinematográfico. A mí me gustaba mucho lo que había hecho en “El limpiador”, que era un trabajo sobre todo de atmósferas. Con Gino Moreno, el editor de la película trabajamos el montaje usando de referencia la música de Anna Meredith que es la compositora de “Eighth Grade”, y creíamos que Karin era la persona ideal para este proyecto. Eso se notó desde la primera reunión que tuve con ella pues tenía el concepto de la película muy claro. Ha utilizado muchos sintetizadores, así como sonidos de teléfonos malogrados o fallas de comunicación, que es un poco de lo que habla la película.

Además, hay varios temas de bandas peruanas nuevas y muy interesantes como Suerte Campeón, Dan Dan Dero, Taneli Lucis, Santa Garcia, Perra Vida, Isabela Sudada y Camille Jackson. Creo que la unión de estos temas con la música de Karin crean el espíritu que estaba buscando para la película.  

Justamente en tus trabajos previos, además de los cortos, destacan los videoclips de bandas de rock. Me comentabas que esos trabajos te han ayudado especialmente en la realización de la película. ¿En qué aspectos te fueron de ayuda?

En primer lugar porque realizando estos videoclips encontré a un gran grupo de amigos que tenía muchas ganas de hacer cosas. Todos muy humanos, sensibles y talentosos. La mayoría de ellos trabajaron en la película. Cuando haces videoclips tienes la posibilidad de jugar mucho e improvisar. En mi trabajo con los actores de la película, sobre todo con los más jóvenes, lo hicimos de esa manera. Además, la mayoría de referencias que les daba era música y videoclips.

En mi perfil de Spotify tengo un playlist que se llama «Un gusano en mi manzana», que además de tener el soundtrack de la película incluye un montón de canciones de bandas peruanas que me hubiese gustado poner en la película [N.E.: Aquí pueden escuchar el playlist].

La película se estrenará en el Festival de Lima, y luego probablemente busquen llegar a la cartelera comercial. ¿Cómo ves el escenario actual, respecto a las ventanas de exhibición y los espacios que tienen las películas peruanas para encontrar a su público?

Nosotros ya estamos en contacto con una distribuidora para poder estrenar la película. Aún no está definido porque tenemos que ver temas de fechas y sabemos que eso siempre es complicado. Creo que la película tiene potencial comercial, en especial con un publico joven que esté buscando nuevas alternativas en la cartelera comercial sobre todo si hablamos de cine peruano. Valquiria Huerta, Diego Pérez, Ximena Palomino y Fiorella Pennano son actores jóvenes que tienen llegada con un público más abierto a nuevas propuestas. Además, el hecho de contar con actores reconocidos como Miguel Iza, Joaquín de Orbegoso, Eduardo Camino y Victor Prada hacen que también sea atractiva para un público más adulto.

Siempre pensé que «Larga distancia» estaba en el medio de esos dos caminos, una propuesta alternativa y a la vez comercial, una película seria y a la vez divertida, por eso creo que es especial. Creemos que es súper importante tener una promoción interesante y creativa en el momento que se vaya estrenar la película y es algo en lo que venimos trabajando hace ya un par de meses. 

Sobre el director: Franco Finocchiaro Salas (Lima, 1989) es guionista y director de cine, videoclips y publicidad. Ha dirigido los cortometrajes «Educación física» (2012), «Lima Lezama» (2013), «El muerto» (2015); y el mediometraje documental «La terrible karavana» (2013) . Ganó el Concurso Nacional de Cortometrajes – DAFO 2015 con «El muerto». Su primer largometraje «Larga distancia» ganó el Concurso de Postproducción – DAFO 2018. Ese mismo año estuvo entre los 20 jóvenes seleccionados al Málaga Talent.

Larga distancia (2019)

Ficha técnica
Duración: 80 minutos
Dirección: Franco Finocchiaro
Guion: Jorge Ossio y Franco Finocchiaro
Producción general: Jimena Hospina
Producción ejecutiva: Guillermo Vásquez Mendoza
Fotografía: Christian Valera
Arte y vestuario: Natalia Gutiérrez
Sonido: Amador del Solar
Música original: Karin Zielinski
Edición: Gino Moreno

Ficha artística:
Miguel Iza, Valquiria Huerta, Fiorella Pennano, Denise Arregui, Ximena Palomino, Diego Pérez, Joaquín de Orbegoso, Victor Prada, Eduardo Camino, Miki Vargas