Este año el 23 Festival de Cine de Lima rendirá homenaje a la directora y guionista francesa Claire Denis (París, 1946). Será una oportunidad única de tener en Lima a quien es considerada una de las cineastas más importantes del mundo, una apreciación en la que diversos profesionales del cine, nacionales e internacionales, coinciden. Por ejemplo, el cineasta estadounidense Barry Jenkins (“Moonlight”, “If Beale Street Could Talk”) se refiere a Denis como «la más grande cineasta en actividad» (“the world’s greatest working filmmaker”), mientras que para el crítico peruano Isaac León Frías, la realizadora francesa es la mejor directora de cine que existe en la actualidad.
Este no será, sin embargo, el primer contacto con el cine de nuestro país que tendrá Claire Denis: recordemos que fue ella quien presidió el jurado que le otorgó el Premio del Jurado de la sección «Un certain regard» del Festival de Cannes a la película peruana «Octubre», de Daniel y Diego Vega (quienes por cierto, regresan justamente este año con «La bronca», cuyo estreno absoluto se dará en el Festival de Lima).
En este artículo, repasamos la trayectoria y algunas declaraciones de esta influyente cineasta premiada en los festivales de cine más prestigiosos del circuito internacional: desde Cannes hasta Berlín, pasando por Locarno, Rotterdam y San Sebastián.
La escuela de Rivette, Jarmusch y Wenders
Después de sus estudios de cine, Claire Denis empezó a trabajar como asistente de dirección de directores renombrados como Robert Enrico en “Le vieux fusil” (1975, ganadora del César a la mejor película), de Costa-Gavras en “Hanna K.” (1983, nominada al León de Oro en Venecia), de Jim Jarmusch en “Down by Law” (1986, nominada a la Palma de Oro en Cannes), de Wim Wenders en “Paris, Texas” (1984, ganadora de la Palma de Oro en Cannes) y “Las alas del deseo” (1987, ganadora del premio al mejor director en Cannes).
Durante esta etapa, Claire Denis también trabajó junto al director Jacques Rivette, una de las principales figuras de la Nueva Ola Francesa. Rivette ejerce una fuerte influencia en el trabajo futuro de Denis, particularmente en la importancia de «no traicionar a sus personajes» y la de tener una «perspectiva moral» en relación con su obra [Entrevista a Claire Denis en Les Inrocks, julio de 1994].
Mientras trabajaba como asistente de dirección de Wim Wenders en “Paris, Texas”, Claire Denis decidió que estaba lista para preparar su salto a la dirección.
Repaso por su filmografía
Su primer largometraje como directora es “Chocolat” (1988). Se trata de un film autobiográfico y particularmente marcado por su infancia en Camerún. Fue seleccionado para competir por la Palma de Oro en el Festival de Cannes y fue nominada como mejor ópera primera en los premios César de la Academia Francesa de Cine.
Su segunda película de ficción, “S’en fout la mort” (1990), compitió por el León de Oro y ganó el premio a la mejor edición en el Festival de Venecia. Este film sobre una pelea de gallos ilícita que se realiza en el sótano de un restaurante, llamó la atención de los críticos por la investigación que hace Denis sobre la forma cinematográfica y la relación con el cuerpo.
En 1994 estrena “J’ai pas sommeil”, film de suspenso y misterio sobre unos artistas que podrían estar relacionados con un asesino en serie que aterroriza París. Es elegida una de las 10 mejores películas del año por la revista Cahiers du Cinéma y el diario Le Monde lo califica como “un gran film político”.
“Nénette et Boni” (1996), la historia de dos hermanos que se reencuentran, ganó el Leopardo de Oro a la mejor película del Festival de Locarno. En 1999, Denis estrenó “Beau Travail”, film bélico que recibió menciones especiales en los festivales de Rotterdam y Berlín, así como el César a la mejor fotografía.
En la película “Trouble Every Day” (2001), protagonizada por Vincent Gallo y Béatrice Dalle, analiza las pulsiones destructoras del amor. Esta es, además, una de las pocas películas de Claire Denis que recordamos que se hayan estrenado comercialmente en Lima. Llegó con retraso, en abril del 2005, bajo el título de «Amor caníbal».
En el drama “Vendredi Soir” (2002), narra con inmediatez el encuentro fortuito entre un hombre y una mujer en medio de un embotellamiento en las calles parisinas.
Posteriormente, Claire Denis explora el tema de los complejos lazos de paternidad en los dramas “L’intrus” (2004), sobre un hombre que busca un transplante de corazón y “35 rhums” (2008), sobre la tensión en la relación de un padre viudo y su hija cuando ella desea independizarse.
A fines de la década pasada, Claire Denis presentó en la competencia oficial del Festival de Venecia el drama bélico “White Material” (2009) protagonizado por Isabelle Huppert, como una mujer que lucha por defender sus plantaciones de café, su familia y su vida mientras estalla una guerra civil en un país indeterminado de África.
En 2013, presenta el film “Les salauds” en la competencia oficial de la sección Una cierta mirada del Festival de Cannes. Vincent Lindon y Chiara Mastroianni protagonizan una historia marcada por secretos familiares que salen a la luz después de un trágico suceso.
Su penúltimo largometraje titulado “Un beau soleil intérieur” (2017) muestra a Juliette Binoche como una artista divorciada que busca el amor verdadero. La película ganó el premio de la Sociedad de Autores y Compositores Dramáticos (SACD) de la Quincena de Realizadores del Festival de Cannes y Binoche fue nominada a varios premios por su poderosa actuación, incluyendo el César y el European Film Award.
En su película más reciente, “High Life” (2018), Claire Denis se aventura en el terreno de la ciencia ficción. Robert Pattinson y Juliette Binoche protagonizan esta historia sobre una misión espacial que tiene lugar más allá del sistema solar. Ganó el premio de Fipresci en el Festival de San Sebastián y recibió la aclamación de gran parte de la crítica francesa, como Le Monde y Libération que la calificaron de obra maestra.
Claire Denis en sus propias palabras
Compartimos cinco declaraciones que Claire Denis ofreció a medios estadounidenses como Indiewire y The New York Times. Estas reflexiones revelan parte de su perspectiva y su metodología como cineasta:
“Crecer en África al final de la era colonial marcó mi infancia. Mi padre nos dio la libertad de pensar, la libertad de ser independientes, de no ser tan franceses. Pero cuando llegué a Francia a los 13 ó 14 años, me di cuenta de que era completamente diferente. Había sido educada para una vida diferente. Tal vez no me sentí tan apta para ciertas cosas en Francia. Y por lo tanto, el cine se convirtió en una razón para vivir y expresar mis sentimientos”.
“Sé que a algunos directores les gusta tener cierta distancia con el proceso de creación. Como si estuvieran en la habitación de al lado, con un gran control sobre todo, pero no cerca. Entiendo eso, pero para mí ocurre exactamente lo contrario. Estoy lista para afrontar las peores condiciones siempre que esté junto con los actores y el equipo y sienta que estamos haciendo algo bueno y que estamos juntos compartiendo algo”.
“La preparación con los actores y actrices es muy física. Actualmente no hago ensayos porque cuando hice mis primeras películas me di cuenta de que siempre me arrepentía de esos ensayos. Ahora hago muchas cosas alternativas, que son una suerte de ensayo sin el nombre del ensayo, sin decir los diálogos del guion, pero más bien concentrándonos en el estado de ánimo o en cosas tangibles, como el vestuario o detalles que pueden parecer frívolos, pero que ayudan a crear un fuerte vínculo con el personaje. A veces también hay otro tipo de entrenamiento, como el que hicimos en “High Life”. Fuimos a un centro astronómico, donde entrenan los astronautas”.
“La búsqueda de locaciones es como una persecución. No estás buscando solo una locación, estás buscando la película misma. Cuando elijo una locación es porque entiendo cómo voy a filmarla. Si no es así, sé que no es una buena locación para mí. Busco una conexión con esa locación”. “Creo que mis películas tienen cierta ternura y cierta humanidad. Eso es lo que más cuenta para mí”.
Horarios para el #23FCL
Durante el Festival de Lima, se realizará un conversatorio especial con Claire Denis, el sábado 10 de agosto a las 11:00 a.m. en la Sala Azul del CCPUCP. Acompañarán a la directora francesa, el crítico Ricardo Bedoya y la cineasta Rosario García-Montero.
Además, como parte de la programación del festival, se proyectarán tres películas de Claire Denis, ocasión ideal que tendrán muchos cinéfilos para descubrir o revisitar la obra de una cineasta imprescindible. Compartimos a continuación los horarios de proyección:
“High Life”
10 de agosto a las 7.00 pm – Sala Roja CCPUCP
13 de agosto a las 10.15 pm – Cineplanet Alcázar
“Les salauds”
14 de agosto a las 5.30 pm – Cineplanet Alcázar
“S’en fout la mort”
13 de agosto a las 9.30 pm – Sala Azul CCPUCP
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