Este año pude experimentar y entrar por primera vez, aunque con algo de vértigo, en el cine inmersivo, con “Permiso para bailar (denegado)” / Dance Permit (Denied) una película de realidad virtual de la directora peruana Claudix Vanesix, joven artista y performer trans. Esta obra, una experiencia realmente fascinante, fue uno de los 13 trabajos seleccionados, en la competición de No Ficción Inmersiva, del Festival Internacional de cine documental de Ámsterdam – IDFA.
La sección DocLab del festival ya se ha convertido en un referente internacional en su género. Se trata de experiencias inmersivas con actuaciones en directo, instalaciones de RV y experiencias multisensoriales que permiten al espectador sumergirse en el pensamiento innovador de sus creadores. Técnicas como la IA también son utilizadas como inspiración creativa en varios proyectos, y así mostrar cómo estas obras urgentes pueden despertar el debate social y a la vez ser transformadas artísticamente por sus creadores.
Claudix Vanesix compartió sus experiencias, su trabajo y sus proyectos con nosotros en esta conversación.
Felicidades por tu participación en el IDFA. Para quienes no te conozcan, ¿puedes contarnos, quién es Claudix Vanesix?
Gracias, esta obra es un diálogo con los hombres de mi familia y nuestra herencia cultural: “Los Negrazos de Sipza”, de La Merced en Ancash. Poder participar del IDFA ha sido un gran esfuerzo de parte del colectivo del que formo parte, AMiXR.
Decir «quién soy» es imposible sin decir quiénes he sido. Soy una persona trans no binaria (elle/ellx), actualmente me encuentro en tratamiento de reasignación hormonal (HRT) y desde hace un año e indefinidamente mi nombre es Claudix Vanesix. Soy artista transdisciplinar, trabajo principalmente con el arte de performance y con contenido audiovisual. Antes de eso he utilizado otros nombres y me he dedicado a la actuación, la confección y las artes visuales.
¿Cuándo y cómo empezaste a trabajar con realidad virtual?
Durante la pandemia empecé a trabajar con un equipo estadounidense que desarrolla software en VR, yo me encargaba de interactuar con lxs usuarixs a través de hologramas, y de entender qué tipo de necesidades y fortalezas ofrece este medio inmersivo para la comunicación humana global. Durante meses estuve conociendo personas de todas partes del mundo y conversando sobre las expectativas que las Realidades Extendidas (XR) estaban generando en el mundo tecnológico y la potencialidad de estos «nuevos medios». Luego de probar distintos modos de producción de contenido me decidí por experimentar con el video 360.
¿Cómo nace «Permiso para bailar (denegado)», y de qué técnicas te has valido para su creación?
Yo crecí en Lima Norte, en un barrio de migrantes ancashinos. Mi abuelo Jovino, papá de mi papá, era un miembro activo de la Asociación Progreso La Merced, un espacio donde diferentes familias nos reunimos a conservar nuestras tradiciones a pesar de haber migrado. Durante mi infancia vi a los hombres de mi familia, liderados por mi abuelo, bailar en honor a la virgen cada año. Los roles de género no eran algo que yo me cuestionaba en esa época, pero al ir creciendo me empecé a cuestionar por qué yo no podía bailar. Esto es algo que se repite en varios territorios dentro del Perú y del mundo, tradiciones teatrales o danzas folklóricas que excluyen de la práctica en vivo a las personas nacidas con sexo femenino. En algunos casos los hombres jóvenes o niños suelen interpretar los personajes femeninos en esa danza o teatralidad. Yo formo parte de una generación que ha empezado a desafiar esa norma.
En mi familia nadie bailaba desde la muerte de mi abuelo y yo me sentía muy triste de contemplar la posibilidad de que esta herencia se pierda. Decidí confeccionarme un traje y bailar. Esto por supuesto generó una serie de discusiones y debates dentro de mi núcleo familiar sobre quién tiene derecho a cuestionar la danza o no. Una de las discusiones importantes era mi sexo/género, pero la otra mi desarraigo: yo no nací ni vivo en Ancash.
La película está compuesta de un registro inmersivo de mi acción de bailar, archivo familiar fotográfico y de video, y videos generados con inteligencia artificial. Los testimonios de mi hermano y mi padre, danzantes, son cruciales para poder entender por qué esta conversación es de importancia familiar y colectiva. discutimos sobre la sobrevivencia y transformación de nuestras tradiciones y sobre cómo una propuesta de reinvención afecta a quienes practican la danza. El archivo familiar ha sido mi gran apoyo durante el proceso creativo, lo recopilé de mi madre, mis tías y mis primas. Además, entrené redes generativas con videos de mí mismx bailando con un traje de hombre, bailando sin traje, bailando con un traje femenino. Esa especulación o deformación de las características originales del traje se contrastan con las imágenes originales del archivo.
¿Es posible financiar este tipo de proyectos en Perú?
Me gustaría poder decir que sí. La verdad es que este proyecto se realizó en condiciones poco ordinarias y es una obra de arte experimental más que una obra de cine tradicional. Este año tuve la oportunidad de ser jurado en la categoría de creación experimental de la DAFO y me enteré de que el estímulo a la creación con «Nuevos medios» fue eliminado. Es claro que el fomento al arte de parte del estado peruano está en riesgo de desaparecer.
Formas parte de un colectivo peruano dedicado a la realización de proyectos de Inteligencia Artificial (IA) , Realidad Virtual (VR) y Aumentada (AR). Háblanos de AMiXR.
Somos AMiXR: Lorena García, Cocompi (Jorge Pablo Tantavilca) y yo. En marzo del 2024 cumpliremos dos añitos de experimentación transdiciplinar. Como colectivo lo que nos une es la curiosidad y también el amor. Nos sintonizamos en nuestro entender del arte como expresión política. En Lima hemos hecho dos versiones de un evento llamado La futura ya pasó, en Casa Bagre, con el apoyo de nuestrxs amix colaboradores. Creemos mucho en la autogestión y la cogestión; nos interesa generar espacios de diálogo, de formación y de experimentación. Nos interesa contribuir una voz activa dentro del feminismo decolonial y la creación cuir/queer/trans. Esa es nuestra comunidad. Estamos desarrollando una propuesta que involucra tecnologías de nuevos medios, pero que no excluye la ritualidad o nuestras tradiciones andinoamazónicas.
Dance Permit (Denied) es nuestra primera obra VR no interactiva y tenemos un plan de distribución global que nos emociona mucho.
Actualmente nos encontramos desarrollando FEEDBACK, una experiencia interactiva para VR que utiliza video 360 y contenido generado por computador, el resultado final será un videojuego performático. Obtuvimos el estímulo a la creación con nuevos medios DAFO 2022 y el premio de honor en el festival Mediamorfosis 2022, es un proyecto mucho más complejo e involucra la coproducción con el estudio de nuevos medios Nanai, de Chile.
Este año estrenamos la obra de performance XR Tokens No Fornicables (NFTs) y la hemos presentado en San Sebastián (Tabakalera), Berlín (Plataforma /DOCK 11), Linz (Ars Electronica) y Bologna (Kindergarten). Esta performance tiene también un plan de distribución global muy emocionante para el 2024 que incluye Europa, Estados Unidos y Oceanía.
¿Cuáles son tus planes futuros Claudix?
Además de mis planes con AMiXR, actualmente me encuentro desarrollando una performance musical llamada Songs for NPCs en el Ars Electronica Center en Austria, lo cual es como un sueño hecho realidad para mí (y un gran desafío). En esta obra, utilizo captura de movimiento en tiempo real para hacer un concierto anti futurista con múltiples personajes que forman parte de la dinámica gamificada de la economía global, en la cual algunas personas son utilizadas como si fueran NPCs: personajes generados por computador, sin sentimientos y funcionales para las necesidades de lxs usuarixs. Esta obra tendrá su preestreno en el 2024.
Desde diciembre de 2023 hasta mayo de 2024 mi obra Amy Camus AR formará parte del Miami Art Basel en el Perez Art Museum como parte de la exhibición Perpetual Motion. Esto me alegra muchísimo ya que esta obra originalmente formó parte de El Fuego Drag de Yma Sumac, muestra que fue censurada en el Centro Cultural de España en Lima en el año 2021.
El próximo setiembre, en Ancash, acompañaré a mi hermano Leonel Arturo quien será obsequiante en la celebración de la Virgen de La Merced. Este año queremos organizarnos con mi mamá, mis primas y mis tías para bailar una nueva versión de nuestra danza tradicional. No puedo ni explicar cuánto orgullo siento por participar en la transformación y resignificación de un evento tan importante para mi familia. Creo que esto es algo que está pasando en diferentes danzas y me alegra mucho formar parte de este movimiento.
Desde el año pasado me encuentro estudiando una maestría en Media Art Cultures con una beca de la Unión Europea con alianzas en Asia. Estos programas son especiales porque cada semestre se desarrolla en una universidad de cada uno de los países miembros, mi primer año lo cursé en Austria y Dinamarca. Actualmente me encuentro cursando mi tercer semestre en Polonia y el próximo año estaré en Singapur, desarrollando una investigación sobre la encarnación de la Inteligencia Artificial y la puesta en escena de las Realidades Extendidas.
Algo más sobre el IDFA 2023
La trigésima sexta edición del IDFA, Festival Internacional de Cine Documental de Amsterdam se celebró del 8 al 19 de noviembre pasado, ofreciendo más de 250 títulos, obras documentales que llegaron de todo el mundo. Este año algunos de los ganadores fueron: 1489, de Shoghakat Vardanyan (Armenia), que ganó el Premio IDFA a la Mejor Película; Ariel Kuaray Ortega y Ernesto de Carvalho ganaron el Premio IDFA a la Mejor Película en la Envision Competition por Canuto’s Transformation (Brasil).
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