Me duele admitirlo, pero cada vez voy menos a una sala de cine comercial para observar una película. Tienen que aparecer contundentes razones para salir de casa, pelear contra el tráfico limeño, los boletos costosos, las secuelas interminables que reflejan la poca variedad de lo que se exhibe y las cada vez más invasivas luces de celulares en pleno trance cinéfilo. Aun así, la cosecha de lo que se pudo observar (en pantallas grandes y chicas) el año pasado estuvo bien nutritiva para la evasión y reflexión necesarias en esta jungla de cemento llamada Lima.
Acá mi listado con lo más disfrutable en este 2024 cinematográfico:
Circuito comercial
Días perfectos (Perfect Days, Wim Wenders, Japón – Alemania, 2023). ¿Cómo no te va a estrujar el corazón ver el rostro emocionado de Hirayama (conmovedor Kôji Yakusho) mientras suena “Feeling Good” de Nina Simone? La sonrisa de él es una descarga de esperanza por una vida sencilla y a la vez libre. Hacía tiempo que no llorábamos en un cine.
Mi amigo robot (Robot Dreams, Pablo Berger, España, 2023). Se podría escribir que esta es una animación sobre la amistad (o el amor), pero sería muy injusto reducirla a solo eso. Habla también sobre “el dejar ir”. Si dices querer a alguien y esa persona está mejor sin ti, ya sabes que hacer: recuerda ese baile juntos y sigue tu camino.
Vidas pasadas (Past Live, Celine Song, EE UU – Corea del Sur, 2023). Parecida a Mi amigo robot por los motivos escritos arriba, pero con la diferencia que todxs involucradxs en este triángulo de sentimientos se llegan a conocer, conversan y hasta respetan. Celine Song no se arrepiente de la decisión que tomó, lo añora con cariño y lo que es mejor, lo hace película.
Guerra civil (Civil War, Alex Garland, EE UU – Reino Unido, 2024). Hay escena que aún nos escarapela el cuerpo al rememorar este film: un hombre (alucinante Jesse Plemons) con uniforme y rifle interroga a unos asustados fotorreporteros cerca de una fosa. “¿Qué clase de americano eres?” o ¿De qué parte de America vienes?”, pregunta a cada uno. Con cada respuesta, la tensión va en aumento. La obra más política de Garland no es una película de terror, pero casi.
Yana-Wara (Óscar Catacora, Tito Catacora, Perú, 2023). Esta notable película aimara asume muchos riesgos: en el tema que aborda (la violencia de género y el abuso sistemático a las niñas en zonas rurales), la fotografía depurada en blanco y negro, un montaje que permite profundizar la sensación de terror del relato y una puesta en escena que logra con su pulcritud y sencillez, conmovernos demasiado. El talento de Óscar Catacora (+) y la precisión de Tito Catacora están impregnados en cada fotograma de Yana-Wara, un nuevo logro artístico que se impondrá ante el olvido e incluso hasta la misma muerte.
Alien: Romulus (Fede Álvarez, EE UU, 2024). [Imagen de portada]. Cuando parecía complicado recuperar una franquicia que estaba a la deriva (curiosamente propiciado por sus mismos creadores), llegó el uruguayo Fede Álvarez para impregnarle frescura y conchudez a una nueva película de Alien. ¿Acaso no hay algo más perverso que colocar en una nave especial (de las corporaciones) a jóvenes ambiciosos como carnada fresca para las bestias? Mejor es escapar de unos monstruos hambrientos que quedarse en una vida de pobreza.
La sustancia (The Substance, Coralie Fargeat, Francia, Reino Unido, EE UU, 2024). Tal vez la película más comentada del año. Y con razón. Mucho se ha escrito sobre su particular belleza, la forma como presentan los cuerpos femeninos, sus excesos narrativos o la pericia visual de su fotografía. Si le quitas todo eso y te quedas con el momento en el que Elisabeth Sparkle (Demi Moore) se prepara para una cita con un pretendiente, retoca su maquillaje varias veces frente a un espejo. Para luego odiar su bello reflejo. Se rinde y limpia la cara con fuerza. Ya no irá. Esa noche decide quedarse en casa. Sola. Y ese es el horror más perverso: el miedo a la soledad.
Robot salvaje (The Wild Robot, Chris Sanders, EE UU, 2024). Mi sobrino ya tiene edad para ir al cine. Cuando le pregunté que película quería ir a ver. Me dijo sin dudar que Robot salvaje, ya que la había disfrutado por partes en TikTok y quería verla “completa y gigante”. Cuando al fin la apreciamos en sala, inmensa fue mi sorpresa por el abordaje de la cinta animada al peliagudo tema de la adopción con tanta inteligencia, ternura y deslumbrante animación. La emoción del pequeño Martín me será imborrable.
Circuito alternativo
Favoriten (Ruth Beckermann, Austria, 2024). Visto en el 15° Festival Al Este. Este documental nos introduce con destreza y sensibilidad a un salón de clases de niños vieneses en sus primeros años de aprendizaje. Muchos de los pequeños son hijos de turcos y árabes migrantes. Lo mejor de la película está en la figura de la docente Ilkay Idiskut que acompaña, educa con paciencia y propicia a que sean los propios estudiantes quienes se cuestionen sus opiniones y decisiones en el aula.
Paucartambo (Michael Net, William Bustos, Perú, 2024). Visto en el 5° Festival Lima Alterna. Se han hecho varias películas sobre la Fiesta de la Virgen del Carmen de Paucartambo (Cusco) en el cine peruano. Pero creo como esta ninguna con tanta gracia y picardía. Narrada con la particular voz del cusqueño Augusto Casafranca, este documental adquiere una potencia inusitada gracias al poder de sus imágenes y algunos testimonios casi clandestinos.
Perro negro (Black Dog, Guan Hu, China, 2024). Visto en la 10 Semana del Cine Ulima. La China que se nos muestra en esta película es muy distinta a la de que usualmente vemos en su cine más industrial. Esta cinta nos ofrece como escenario una ciudad china desértica, fantasmal, donde algunos sobrevivientes deambulan entre los escombros de un progreso que parece nunca llegó. Los personajes principales son un expresidiario y el perro salvaje que adopta con esfuerzo. Destaca lo ingenioso y poético de su propuesta visual y esa extraña comicidad en las interacciones entre el humano y su animal. Una rabiosa melancolía.
Hija pródiga (Prodigal Daughter, Mabel Valdiviezo, EE UU – Perú, 2024). Visto en la 10 Semana del Cine Ulima. Pocas veces el documental puede funcionar como un verdadero exorcismo. La directora lucha contra sus propios demonios y los enseña en pantalla. Conflictos en varios frentes: la familia, el país donde naces, el lugar a donde migras, los vicios personales, el arte contestario, la enfermedad y la reconciliación con uno mismo. A pesar de todos esos problemas, Mabel se mantiene firme, creativa y honesta.
Los tortuga (Belén Funes, España, 2024). Visto en la 10 Semana del Cine Ulima. Otra demostración del gran talento de la actriz chilena Antonia Zegers. Hay una escena en la que su personaje Delia, junto con su hija adolescente, visita un departamento para ver la posibilidad de alquilarlo ya que ellas serán desalojadas del suyo. En el momento que la vendedora le enseña la cocina se descubre que había una familia desayunando en el lugar (se entiende que será desalojada pronto). Esto desata la furia de Delia contra la usurera. Pocas veces ves fuego tan intenso en los ojos de una intérprete, y la Zegers lo consigue siempre.
La estrella azul (Javier Macipe, España – Argentina, 2023). Visto en el 36° Festival de Cine Europeo de Lima. Lúdico. Es la palabra que se me viene en la memoria al escribir sobre esta película. Una biopic bien curiosa sobre Mauricio Aznar, un malogrado rockero que cruza el charco, pero no para colonizarnos, sino para aprender del folklore argentino y sus cultores. Hay un respeto y horizontalidad hacia los músicos y su bucólica forma de trascender que resulta encantador. Pero lo travieso de la propuesta surge con la llegada del tercer acto, el protagonista es consciente que está en una película sobre su vida y decide seguir adelante a pesar de que sabe de su desenlace adverso.
Plataformas online, internet
Heroico (David Zonana, México – Suecia, 2023). Visto en Prime Video. Las comparaciones con Full Metal Jacket (Stanley Kubrick, 1987) o La ciudad y los perros (Francisco J. Lombardi, 1985) serán odiosas como inevitables. Ni modo. Lo que sucede en esa escuela militar mexicana es una seguidilla de abusos sistemáticos y normalizados que, con la excusa del patriotismo, se trasladan en otros espacios sociales. Hay jerarquías que se asientan con violencia. Y esta película de ficción las denuncia sin amagos.
Los pequeños amores (Celia Rico Clavellino, España – Francia, 2024). Visto en un avión. Aproveché un vuelo trasatlántico para ver todas las películas que pude. De la travesía ahora solo recuerdo este film: Teresa (Tierna María Vázquez) ama a su severa progenitora (Adriana Ozores), pero ya no puede ver el mundo como ella lo hace. Obligadas a convivir durante un cálido verano en una casa en refracción, la relación entre ambas pasará también por un proceso de reconstrucción. Una película sencilla en sus formas y profunda en sus revelaciones.
Desafiantes (Challengers, Luca Guadagnino, EE UU, 2024). Visto en Prime Video. No la alcancé a ver en cine, pero sí en plataforma. ¡Qué tal despliegue de energía audiovisual! Hasta en los momentos fuera de las canchas, se percibe adrenalina, potencia y contraataque. Josh O’Connor, Zendaya y (en menor medida) Mike Faist imprimen intensidad a sus personajes que compiten en todo momento. En ese partido final y, con la música compuesta por Trent Reznor y Atticus Ross al tope, el sudor cayó sobre mi teclado irremediablemente.
La primera profecía (The First Omen, Arkasha Stevenson, EE UU, 2024). Visto en Disney +. Atraído por el mejor trailer que vi este año, vi esta película que posee unas imágenes muy sugerentes y perturbadoras, pero peca con alguno que otro exceso narrativo. La directora sorprende con esta ópera prima que sabe navegar con eficiencia entre el homenaje y la herejía al material original (The Omen, Richard Donner, 1976).
Secretos de un escándalo (May December, Todd Haynes, EE UU, 2023). Visto en Prime Video. La actriz Elizabeth Berry (Natalie Portman) parece imitar más los gestos, el comportamiento y hasta la tristeza de Gracie (Julianne Moore) cada vez que se reúnen. Este juego de espejos encierra mucho más que la preparación para un papel. Es la evocación a una vida ajena, más compleja y sin arrepentimientos que la propia. Lo curioso es que esto también se aplica para Joe (conmovedor Charles Melton), el adulto abusado en el pasado por Gracie que nunca pudo decir no. Cuesta escribirlo: Secretos de un escándalo es un cruel melodrama sobre el poder y la dominación (disfrazada de admiración y amor).
El jockey (Luis Ortega, Argentina, Argentina, México, España, Dinamarca, EE UU, 2024). Visto en Disney +. ¿Cómo no va a parecerse a una comedia absurda de Aki Kaurismäki, si el director de fotografía es el mismo Timo Salminen, habitual colaborador del realizador finlandés? Uno no para de reírse con la misión de autodestrucción del jinete Remo Manfredini (hipnótico Nahuel Pérez Biscayart) por una Buenos Aires brumosa que más parece un Helsinki atemporal. Mención aparte para la mejor escena de baile del 2024 con una pletórica Úrsula Corberó a ritmo de “Sin disfraz” de Virus.
Monkey Man (Dev Patel, EE UU,2024) Visto en Prime Video. El actor Dev Patel debuta en la dirección con esta fábula sobre la venganza (que también protagoniza). Su Monkey Man no solo destaca por las intensas escenas de acción, también lo hace por fusionar de manera atractiva elementos tradicionales, religiosos y artísticos de la cultura hindú, gracias a un narración ágil y furiosa. El color rojo sangre impregna el “camino del héroe” en esta Mumbai imposible de olvidar.
Jurado Nº 2 (Juror #2, Clint Eastwood, EE UU, 2024). Visto en la web. Por el cine gringo, uno tiene una idea básica de cómo funciona el sistema judicial en los Estados Unidos: cualquier ciudadanx puede formar parte de un jurado que declara inocente o no al criminal. Abogadxs, fiscales y jueces sólo complementan este imperfecto procedimiento. Tal vez esto también lo crea Clint Eastwood, que, con 94 años a cuestas, convierte lo que sería un genérico drama judicial en una oda cinematográfica sobre la culpa y el sentido de la justicia. El personaje principal que encarna extraordinariamente el actor británico Nicholas Hoult se llama Justin (onomatopéyicamente suena muy parecido a “Justice”, justicia en inglés), un tipo ordinario que llega a una situación límite: cumplir con un deber social (y acusar a un inocente) o reconocer un gravísimo delito que afectará su futuro. Todo ese complejo “dilema moral” es narrado con maestría y claridad por Eastwood. Hasta incluso con mucha tensión: recordamos ahora (aviso de spoiler) el momento en que la esposa de Justin (Zoey Deutch) recibe en la sala de su casa a la abogada (imperturbable Toni Collette) que desconoce la relación matrimonial; nosotros podemos ver un portarretrato de boda en la mesa que está detrás de la abogada, pero ella no. Deseamos que no voltee. Que no descubra la foto. Que termine sus preguntas y se vaya. La esposa responde algo nerviosa. La abogada parece sospechar algo. Cuando acaba su cuestionario, se levanta. Agradece. Sale del cuadro. La cámara no se mueve, el portarretrato sigue acaparando nuestra atención. Respiramos aliviados. (fin del spoiler). Si este es el fin, Clint. Gracias por todo.
Cortometrajes peruanos
Reflejo (Náyade Mariana Wong Gamboa, 2023). Visto en ciclo «Miradas Femeninas: Cine Universitario», en Elgalpón Espacio. A este cortometraje de ficción (sobre la relación de confianza entre una abuela y su nieta) tal vez le falta un enfoque de lente en una escena, pero lo que sobra es el cariño a los personajes que retrata. La escena final te saca una sonrisa cómplice.
Ojalá pudiera decir la verdad (Víctor Augusto Mendívil, 2024). Visto en la 10 Semana del Cine Ulima. Gran manejo del montaje en esta pieza documental que nos cuenta una trágica historia personal del director y su familia. Cuando pensábamos que ya se había narrado audiovisualmente todo sobre la masacre de Ucchuraccay de 1983, esta película abre nuevos surcos sobre el tema en el cine peruano.
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